Cuentan que M.L actuaba como loca y su homólogo, P.J, la miraba como loco. Los dos se querían como locos, comían como locos y se peleaban como locos. Pero nadie se lo explicó, nadie se lo argumentó y siguieron viviendo como locos, comprando como locos y gastando como locos.
Pasó el tiempo como un loco y M.L y P.J se casaron por locos, trabajaron como locos y tuvieron hijos como locos.
Y sus hijos se comportaban como locos, estudiaban como locos, y se aburrían como locos.Y nadie se lo explicó.
Y toda la familia vivió como loca y disfrutó como loca. Y los abuelos cuidaban de sus nietos como locos, y los nietos crecían como locos, y hablaban como locos... Y nadie se lo argumentó.
Tuvo que ser el tiempo el que acabó con ellos y con su locura...
Espero no estar viviendo a lo loco... blups!
ResponderEliminarSiempre hablo en primera persona y será el tiempo el que acabe conmigo
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